martes, 28 de mayo de 2013

Presentación del Ciclo "La punta de la lengua"

La punta de la lengua
Este ciclo es posible gracias a la Academia Nacional de Letras y el trabajo de Silvia Guerra, Fermín Hontou; Lourdes Ayala, Lucía Delbene. Agradecemos especialmente a Juan Justino Da Rosa, Francisco Pieri, Walter Diconca, Washington Carrasco y Cristina Fernández. 

Es un ciclo de lecturas que se inicia el martes 23 de abril- día del idioma- en la Torre de los Panoramas, Casa de Julio Herrera y Reissig, que es la sede de la academia Nacional de Letras.

El ciclo continuará los últimos viernes de cada mes. Este martes para celebrar el día del idioma leerán los poetas Académicos y los investigadores asociados a la Academia Nacional de Letras textos de Julio Herrera y Reissig, en la casa del poeta, en la que tantas tertulias se hicieron y de la que la casa guardará memoria. 

Poner en voz de poetas actuales poemas de Herrera, es el homenaje que este ciclo rinde al poeta en el día del idioma, considerando a Herrera un gran poeta de la lengua.

El ciclo la punta de la lengua nace del interés por transitar ese espacio de la casa de Herrera, a través de las voces de poetas de distintas edades y tendencias, que lean allí sus creaciones en un ámbito tan fructífero para la poesía como ha sido esa mítica Torre de los Panoramas.

Si bien en este momento hay varios ciclos de poesía, pensamos que ese lugar emblemático de la cultura del 900 es un emplazamiento óptimo para generar desde allí encuentros y lecturas entre gente que está escribiendo ahora.

La lengua nace y se hace en la calle, en la plaza y en el mercado, todos los días y a todos las horas. También, la lengua se genera y se inicia en un vórtice o punta de sí misma, en el pensamiento o en la música de las palabras que se convocan entre sí, en las resonancias que se suscitan, en el  cerrado coto de la mente que se abre hacia un más allá siempre posible, en esa punta, en ese colmo,  de donde surge  la poesía. 

Coord. Silvia Guerra   

domingo, 26 de mayo de 2013

PROGRAMA: MAYO

El viernes 31 de mayo los poetas Tatiana Oroño, Jorge Arbeleche y Eduardo Espina, homenajearán a Selva Márquez. Diego Rodríguez Cubelli estará a cargo de la armonización con bandoneón.

Academia Nacional de Letras. Ituzaingó 1255 esq. Reconquista
Casa de Julio Herrera y Reissig - 19:30 hs.

Jorge Arbeleche

Jorge Arbeleche. Montevideo. Poeta, ensayista, profesor, inspector de literatura, Académico de número. De sus libros destacamos en Poesía; El Bosque de las cosas, Montevideo, Ediciones Linardi y Risso, 2006,La Sagrada Familia”, Montevideo, Ed. Estuario – 2010, “La canción de los duendes” Montevideo, Ed. Paréntesis – 2011 (Edición adquirida por Consejo de Primaria y de  Formación docente para Bibliotecas de Escolares, Maestros y Profesores), “Canto y Contracanto”, Lima – Perú. Ediciones Ncuervos – 2012. Entre sus ensayos se destacan; Una mirada sobre Juana de Ibarbourou. Editorial Biblioteca nacional y Estuario. – 2009, Muestra de la Poesía uruguaya contemporánea – ANL 2010 Colaborador de Ricardo Pallares.
Ha tenido numerosas distinciones por su obra entre las que figuran: Premio Morosoli categoría poesía - (2007), Premio “Bartolomé Hidalgo” -  por “La Sagrada Familia” - (2010), Premio Nacional de Poesía del Ministerio de Cultura en las siguientes ediciones: 1996, 1998, 2000,2004,2006, 2008,2012 por los libros Alfa y Omega, El hilo de la lumbre, Para hacer una pradera, El oficiante, El Guerrero, El bosque de las cosas, La sagrada familia.(1996-2012).



Patroclo
Helena

sábado, 25 de mayo de 2013

Eduardo Espina

Eduardo Espina. Montevideo. De sus libros de poesía destacamos: Valores Personales, 1982; La caza nupcial, 1993, 1997; El oro y la liviandad del brillo, 1994; Coto de casa, 1995; Mínimo de mundo visible, 2003; El cutis patrio 2006, 2009. También es autor de los libros de ensayo El disfraz de la modernidad, 1992; Las ruinas de lo imaginario, 1996; La condición Milli Vanilli. Ensayos de dos siglos, 2003; Historia Universal del Uruguay, 2008; Julio Herrera y Reissig. Prohibida la entrada a los uruguayos, 2010; Las ideas hasta el día de hoy, 2013, estos cuatro últimos publicados por Editorial Planeta.
En Uruguay ganó dos veces el Premio Nacional de Ensayo del MEC y en 1998 obtuvo el Premio Municipal de Poesía por el libro aún inédito Deslenguaje. Sobre su obra poética se han escrito tesis doctorales, y extensos artículos de estudio.
Por el libro El cutis patrio, obtuvo el Latino Literary Award otorgado por el Instituto de Escritores Latinoamericanos, establecido en The City University of New York, y que premia al mejor libro del año escrito en español. En 2011 obtuvo la beca Guggenheim.

La poesía es todo, un hombre cayendo de un décimo piso puede ser poesía y al estrellarse en el suelo se convierte en un acto poético, el trabajo del poeta es convertir la poesía y lo poético en poemas, la poesía sería el material lírico no escrito que carga cierta belleza y  en el cual se intuye la posibilidad de añadirle palabras.

http://www.laotrarevista.com/2009/12/eduardo-espina-entrevista/






LENGUA MATERNA de Cutis Patrio (2006)




EL PALACIO DE LA PRÁCTICA  (Inédito)

martes, 21 de mayo de 2013

Tatiana Oroño


Tatiana Oroño. Escritora. Crítica. Curadora. Investigadora. Profesora de literatura. Cursó Maestría en Literatura Latinoamericana (FHCE, UDELAR). Investigadora asociada a la Academia Nacional de Letras. Su obra figura en el Programa oficial de Literatura, 1º Bachillerato (2006). Publicaciones en Argentina, Brasil, Canadá, Colombia, Chile, Cuba, El Salvador, España, EE.UU., Francia, Holanda, México, Panamá. Premio Bartolomé Hidalgo, Poesía, 2009. Premio Juan José Morosoli Plata, Poesía, 2009. Último libro de poesía: Ce qu’il faut dire a des fissures / Lo que hay que decir tiene grietas. L’Oreille du Loup, París, 2012. Últimas curadurías: Mañana…¡levántese azul!  José Gurvich: una paideia desvelada. Museo Gurvich, Montevideo, 2012;  Pintor de ideas, MNAV, Montevideo, 2012.

Automóvil4s importad4s
10/12 rodados x minuto,  600/700 x hora, 14.000/17.000 x día
                                                                                  maniobran
 en la cruz secundaria del vecindario en el asfalto ciego
                                                           de Asamblea y Candelaria. Una ceguera
atroz [paralela a Rivera, Asamblea es doble mano]
que no cuenta (no ve)
los árboles
que faltan (al paso de los 0Km que esquivan
los semáforos de la avenida y embotellan mi calle). Ni
los cuadros de césped ahogados con cemento.

Los vientos del 23.08.05 descuajaron árboles de raíz.
Atrás tronaron
las cuadrillas con órdenes y sierras. Trituraron
los restos. Los desaparecieron.
                                                                                  ¡Mancillada de mí!

Es trágica ceguera que no ha de registrar qué
arranca
el arranque de las 4X4
cuando no queda sombra que ponerse a la espalda.

El ciclón del 19.09.12 abatió las dos oscuras copas de un jardín.

La caída derribó una tercera, municipal. Tres frondas cercenadas.
Mi cuadra, en cueros. La galaxia olvidada de los pájaros, ni pía. No
tiritan las hojas.
Atrás tronaron
las cuadrillas con órdenes y sierras. Trituraron
los restos. Los desaparecieron.
                                                                                  ¡Mancillada de mí!
 Y extendieron alerta sanitaria: extirparon más de diez ejemplares.
No echaron cal. Cemento echaron. Embaldosaron hoy, octubre 24, cinco nichos.

 [Operación rastrillo // Los árboles son enemigos ¿de la patria?]
                                                                                  ¡Mancillada de mí!
[Operaciones de libre importación // Los autos ¿son la tropa de élite de un ejército que va en coche?]

El dióxido de carbono es una mara de gas a cielo abierto a la puerta de casa.



Escribir para ser una, para echar cuerpo. Pero antes, tener que hacer mil cosas. Por tanto: para ser una, hacer mil y una. ¿De qué escribir? De una cuenta que no cierra: para llegar a una, pasar por mil y una.


Construir

en el polvo
cimentar en la lava
excavar en el aire
apuntalar en punto imaginario

sostener la mirada

contener el aliento

levantar el andamio.